En el mes de marzo del año 2020 como todos saben llegó la pandemia, el suceso que nos cambió la vida a todos, de eso no hay duda. En ese momento yo estaba trabajando en la tercera agencia de publicidad en la que estuve, y como a todos nos tocó trabajar de forma remota en nuestras casas por el distanciamiento y todas las medidas de seguridad que se llevaron a cabo. Estando trabajando en mi casa junto a mi esposo quien también estaba remoto, decidí comenzar a darle vida a un proyecto que siempre había querido hacer. Así que mi horario de la agencia era de 9 de la mañana a 6 de la tarde, y luego que salía de trabajar, lo dedicaba darle vida y forma a mi proyecto. Comencé creando mi website, una cuenta en Instagram, Facebook, etc, para ir teniendo mis espacios en el mundo digital y poder ir creando contenido para publicar poco a poco.
Para no hacer la historia muy extensa, de marzo a agosto pasaron demasiadas cosas, y la más grande fue que crecí rápido y muchas personas llegaban a mí, por recomendaciones de otras personas de mi audiencia, o de clientes. Porque sí, en esos meses estuve trabajando en la agencia de 9-6pm + trabajando con mis clientes del proyecto al que le estaba dando forma, fue una bendición porque los clientes llegaron yo a penas comenzando.